¿Por qué nos debe preocupar que nos digan «ya hablará»?
Durante nuestra práctica clínica y escolar nos hemos encontrado con muchas familias que acuden a recibir información para saber si su hijo/a tiene alguna dificultad porque con 2 años todavía no habla debido a un retraso en el desarrollo del lenguaje. Además, estas familias siempre aluden a que el único feedback que han recibido es “ya hablará”.
El hecho de que un pequeño/a con dos años aún no diga ninguna palabra nos debe preocupar porque no es el desarrollo normal para su edad. Para saber qué dificultad presenta hay que realizar una entrevista con la familia.
Valorar diferentes aspectos para poder concluir un diagnóstico e incluso derivar a otros especialistas para complementar la información obtenida.
Retraso en el desarrollo del lenguaje.
Uno de los problemas que nos encontramos en niños/as que no hablan es un Retraso en el desarrollo del Lenguaje. ¿Qué quiere decir esto? El lenguaje evoluciona de manera normal, pero más lento.
Este tipo de dificultad es transitoria, ya que con una buena intervención se adquieren y se mejoran todos los niveles afectados.
¿Cuáles son los signos que nos deben poner en alerta?
- El lenguaje aparece más tarde de los 2 o 2 años y medio acompañado de muchos gestos para poder comunicarse. El desarrollo del lenguaje indica que sobre los 12 meses los niños ya utilizan palabras para referirse a las cosas o demandarlas. Por lo que si el lenguaje llega más tarde, algo ocurre en su desarrollo.
- Otras veces, el lenguaje ha surgido tarde aumentando de manera significativa, pero sin llegar a entender lo que nuestro hijo/a nos quiere decir. Cuando el niño/a va desarrollando su lenguaje, tiene que cambiar un habla infantil donde no se le entiende hacia una adulta, por lo que los diferentes errores que presentan a la hora de articular deben ir eliminándose con el paso del tiempo. En niños/as con Retraso en el Lenguaje estos errores permanecen más allá de los 4 años.
- Muchas veces, no realizan bien las concordancias entre los elementos de la frase (un camiseta, la casa, etc.)
- Tampoco utilizan nexos, preposiciones, artículos, que hagan que sus oraciones sean más complejas y más elaboradas, por lo que su longitud no abarca más de 2 o 3 palabras en frase. Un habla robótica o que nos recuerda al lenguaje usado en las películas americanas sobre los indios.
¿Cómo trabajamos los logopedas con este tipo de dificultad?
Ante todo, al trabajar con niños, debemos buscar actividades que sepamos que van a motivarles, así aprenderán jugando.
Después de realizar una valoración y ver qué aspectos tenemos que trabajar, realizaremos un plan de intervención, donde exponemos nuestros objetivos a cumplir con el pequeño/a. Tras estos pasos, empieza LA DIVERSIÓN.
- Utilizar un bingo de imágenes para mejorar la atención, conseguir imitación. Desarrolla la comprensión y la expresión. Con este tipo de juego podemos realizar preguntas, elaborar frases de simples a complejas. Trabajar vocabulario por categorías semánticas.
- Boca a boca. Ponemos estos dibujos en el espejo y trabajamos los sonidos del habla. Así los pequeños saben como colocar la lengua para realizarlo. También discriminamos ese sonido a través de actividades localizando la sílaba dónde está.
- Juego. Con los juegos de toda la vida podemos desarrollar el lenguaje en todas sus áreas. Además trabajamos la imitación de roles, comprensión de diversos contextos, turno de palabra.
Hablar con los niños/as es una función sencilla que podemos realizar en casa. Enseñarles cuentos, hacer que nombren las imágenes, contarles cosas sobre aquello que les rodea. Todo ello hará que el lenguaje vaya aumentando siguiendo el desarrollo adecuado.